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DEL BIOGÁS AL BIOFERTILIZANTE
Al final del proceso de digestión anaerobia, cuando a la materia orgánica del residuo o subproducto las bacterias no pueden sacar más biogás, queda el denominado digestato o digerido. Este subproducto contiene multitud de propiedades que permiten su aplicación como biofertilizante. Posee un alto contenido en nutrientes, y en agua, y dado el origen orgánico de la materia prima de donde proceden, puede considerarse un abono orgánico natural.
En nuestras plantas, este residuo es higienizado mediante un proceso de pasteurización a 70ºC durante una hora, y posteriormente se somete a un proceso de separación de la fase sólida y la fase líquida. Además, es minuciosamente analizado en nuestros laboratorios con el fin de comprobar que sus características fisicoquímicas cumplen con la normativa actual vigente, en un entorno donde la nueva Política Agraria Común (PAC) marca mínimos de empleo de fertilizantes orgánicos cada vez mayores frente a los fertilizantes minerales.
Nuestro proceso de digestión anaerobia genera biofertilizantes sostenibles y regulados por la normativa